El Deber (05.05.2019) Según el INE la desocupación general es de un 4,27%, mientras que en los segmentos de menor edad llega al 8,5%. El Gobierno ofrece programas laborales
Según el Ministerio de Trabajo a partir del Servicio Público de Empleo (SPE) con datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), en 2018, de los 2,7 millones de jóvenes de entre 16 y 28 años el 8,5% se encuentra desocupado, un porcentaje alto si se lo compara con el desempleo urbano que afecta a las personas mayores y que el mismo se ubicó en el mismo periodo en un 4,27%, siendo según el Ejecutivo el más bajo de la región.
Al respecto, Emilio Rodas, viceministro de Empleo, Servicio Civil y Cooperativas, explicó que para hacer frente a esta situación desde 2012 vienen trabajando con un Programa de Apoyo al Empleo (PAE) que tiene el apoyo económico del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) por $us 40 millones y que en el periodo 2012-2017 beneficiaron a 19.580 jóvenes de los cuales, luego de una prueba de tres meses, el 61% fue contratado por las empresas.
Rodas explicó que el programa busca ser una alternativa para los jóvenes que están buscando su primer empleo y que la primera experiencia indica que los privados al final de una prueba de tres meses, tiempo en que su salario es cancelado por el Estado, los contratan y son incluidos al mercado laboral. La autoridad hizo notar que entre mayo y septiembre de 2018, 1.025 jóvenes lograron entrar al mercado laboral, de los cuales el 73% fue contratado por el sector privado.
Sin embargo, Jhony Mercado, expresidente del Colegio de Economistas de Bolivia, indicó que esos números no son suficientes y que lo que realmente importa es mejorar las condiciones laborales actuales y frenar su precarización.
Mercado remarcó que los programas laborales que lleva adelante el Gobierno están más centrados en que los postulantes ingresen al mercado laboral, pero no hacen foco en las condiciones en que lo hacen.
“La calidad laboral no tiene que ver con la cantidad, sino en cómo al trabajador se le da las condiciones necesarias para llevar adelante su actividad y cómo los beneficios y la protección social son respetados por los empleadores, además de que el salario percibido le permita cubrir todas sus necesidades básicas y a su vez proyectar otras”, sostuvo Mercado.