Los autónomos son “el eslabón más débil de la cadena productiva”, explica Lorenzo Amor, presidente de ATA. Ellos son quienes más sufren por la caída de la demanda o el cierre de los mercados de crédito, ya que no cuentan con margen para adaptarse. De ahí que vayan a ser uno de los colectivos beneficiados por el plan de choque económico que aprobará este jueves el Gobierno en un Consejo de Ministros extraordinario para frenar la crisis provocada por el brote del coronavirus.

El Ejecutivo lleva más de una semana ultimando las medidas en contacto permanente con los agentes sociales y las asociaciones de autónomos, con el objetivo de que el diseño de las medidas sea fino y se adapte a las necesidades del colectivo. Una de las exigencias comunes de todas las asociaciones de autónomos es que el Gobierno facilite el acceso al seguro por desempleo de los trabajadores del RETA y el Ejecutivo ha recogido el guante.

El Gobierno garantizará el acceso a la prestación por cese de actividad (el paro de los autónomos) a todos los cotizantes del RETA que hayan sufrido una fuerte caída en su cifra de actividad como consecuencia del brote de la enfermedad, explican fuentes conocedoras de las negociaciones. Ahí se contemplarán todos los casos, pero beneficiará especialmente a los autónomos que tienen contratos que se están cancelando, por ejemplo, en el caso de eventos, atracciones del turismo o servicios auxiliares a colegios y guarderías tras su cierre.

Hace un año, el Ministerio de Trabajo acordó con los autónomos que todos cotizarían para tener acceso al seguro por desempleo, pero la realidad es que la mayoría de los casos se siguen denegando. Para evitar que sean los autónomos quienes paguen la ‘cuenta del coronavirus’, el Ejecutivo facilitará el acceso al cese de actividad temporal como causa de fuerza mayor. De esta forma, podrán percibir una prestación equivalente a la de los trabajadores asalariados que sufran algún tipo de reducción de jornada a través de expedientes de regulación de empleo temporal (ERTE). Las cotizaciones acumuladas durante el último año, y que se suman a las realizadas voluntariamente en los años anteriores, apenas se han utilizado, por lo que existe un remanente que podrá utilizar el Ministerio de Trabajo para abonar esta prestación.

Además, el Consejo de Ministros adoptará este jueves otra medida importante, una moratoria de hasta tres meses en las cuotas a la Seguridad Social de los autónomos. En concreto, se permitirá que retrasen el pago de tres meses consecutivos hasta un plazo de máximo de un año para que así estén liberados de una parte de la carga fiscal durante estos meses difíciles por el brote del coronavirus.

Esta medida se une a la que ya aprobó el Consejo de Ministros el pasado martes para que sea el Estado quien se haga cargo de las bajas por coronavirus y también de los casos de cuarentena. Estas bajas se considerarán incapacidad temporal por contingencias profesionales, de modo que los autónomos también podrán percibir la prestación de la Seguridad Social.

Para las asociaciones de autónomos, es fundamental que los trabajadores del RETA afectados por el coronavirus puedan contar con el seguro de desempleo para atravesar estos meses complicados. “Nosotros le hemos pedido al Gobierno que cuando haya una caída de actividad superior al 25% de la facturación y que esta se deba al coronavirus, se active el cese de actividad temporal”, explica Eduardo Abad, presidente de UPTA. Además, en estos casos, la prestación debería considerarse algo excepcional y no restar tiempo al periodo de la prestación por cese de actividad ordinaria que haya acumulado cada autónomo.

"Todos los autónomos están cotizando por el cese de actividad desde hace un año, no tendría sentido que no puedan acceder a la prestación"

“El Gobierno tiene que clarificar el acceso al cese de actividad para los afectados por coronavirus”, apunta Amor, “porque actualmente se deniega el 60% de todas las peticiones”, denuncia. En su opinión, no debería ser el autónomo quien soporte todos los costes de la caída de la demanda, porque ya soportará la mayor parte de la pérdida de negocio.

“Todos los autónomos están cotizando por el cese de actividad desde hace un año, ahora no tendría sentido que no puedan acceder a la prestación”, señala María José Landaburu, secretaria general de Uatae. “Es más fácil que se canalice a través del cese de actividad porque ahí está el dinero acumulado de las cotizaciones y permitiría equiparar a los autónomos con los asalariados”, explica. Esa vía sería más sencilla que habilitar una prestación temporal extraordinaria, que sería la opción alternativa. La decisión no se conocerá hasta que el Gobierno apruebe el paquete de medidas definitivo para frenar el contagio económico del coronavirus.