Según el último informe Estudio Económico de Chile, realizado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), la brecha de ingresos en nuestro país es un 65% más amplia que el promedio general de los países miembros.

Para disminuir estas altas diferencias entre los ingresos promedios del 10% más rico de la población y la del 10% más pobre”, la OCDE recomendó “la adopción de reforma sociales y del mercado del trabajo centradas especialmente en la mujer y en los trabajadores menos calificados”.

De esta forma, la organización llamó a incrementar progresivamente la edad de jubilación de las mujeres chilenas hasta que se iguale a la de los hombres, ya que el sistema de pensiones no logra reducir las desigualdades. Además, el envejecimiento de la población y las mayores expectativas de vida en nuestro país provocará una mayor presión sobre el gasto público.

La OCDE sostuvo que al ampliar la edad de jubilación en el caso de las mujeres, se podría incrementar el PIB per cápita en un 0,6% tras 10 años.

La institución también llamó a aumentar la Pensión Básica Solidaria y el Aporte Previsional Solidario, para reducir la pobreza durante la vejez, y a aumentar las contribuciones para elevar el ahorro.

Eyzaguirre: "No estamos preparados"

El ministro de Hacienda, Nicolás Eyzaguirre, sostuvo que la medida propuesta por la OCDE no sería posible de aplicar en el corto plazo, ya que, culturalmente, "Chile no está preparado para eso".

"En Chile la mujer tiene un doble trabajo. En el mercado laboral trabaja de día y tiene un enorme desgaste en la casa y la crianza de los hijos", explicó.

"Mientras no solucionemos el problema del mayor desgaste de la mujer, no nos parece que culturalmente estemos preparados para igualar los años en que hombres y mujeres pueden jubilar", manifestó.

El aumento progresivo en la edad de jubilación de las mujeres ya se estudió el 2017 en una comisión de expertos, pero no se llegó a acuerdo político.